El que se conoce como “el fin de semana más barato de Mexico” tendrá su decimosegunda versión en este 2022 del 18 al 21 de noviembre y se espera, según datos de la CONCANACO, una derrama económica por 195 mil millones de pesos, lo que significa un par de puntos porcentuales más que en la versión del año anterior. La misma asociación estima que el 20% de los productos que se compren durante el “Buen Fin” será de forma online, dando fuerza a este canal de distribución con cada vez mayor peso entre la preferencia de la sociedad mexicana.
Con una cifra aproximada de 141 mil empresas afiliadas a esta campaña, el sector retail abrirá la temporada de fin de año “a todo vapor”, en buena parte derivada de que las restricciones de aforo por la pandemia han quedado finalmente superadas, se plantea la reactivación total del comercio con plazas y tiendas llenas de quienes buscan aprovechar las ofertas y otros beneficios como meses sin intereses o envíos gratis.
Para la logística el reto que representa también es importante. El sector de almacenaje y distribución ha estado desde al menos seis semanas ocupándose de garantizar el stock de mercancías que deben estar listas en punto de venta, los recibos en centros de distribución son especialmente saturados en esta época y el volumen de servicio se triplica respecto al primer semestre.
El éxito se basa entonces en hacer un análisis a conciencia de la capacidad con la que se cuenta y sumar a tiempo mayor estructura a través de alianzas que permitan asegurar la escalabilidad de las operaciones, es decir, se tuvo que entender cuáles eran las capacidades reales para dimensionarlas, fortalecerlas y aún así ser muy consiente de las promesas de entrega reales para que la planificación juegue a favor y no en contra en este incremento de trabajo, así mismo aceitar los planes de contingencia para que nada, o casi nada al menos, nos agarre desprevenidos.
Meses atrás en Gomsa Contract Logistics, trabajamos intensamente la estrategia operativa para incrementar el roster de socios comerciales, además se negociaron condiciones de los procesos a la preparación de mercancías en el almacén y se sumaron más unidades a la logística de última milla, en estas semanas se monitorea constantemente la necesidad real vs la proyectada y el resultado se pronostica optimista, sin embargo, estamos a la mitad del camino, conforme se acercan las fechas de venta, la planificación se vuelve anécdota y los clientes demandan respuesta inmediata, desde nuestra trinchera, lo entendemos y nos declaramos preparados para responder.
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